domingo, 29 de marzo de 2009

¡Qué fácil es incitar a viajar!


Esta semana toca hablar de los viajes, concretamente del periodismo de viajes. Santiago Tejedor, doctor en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona, dirige el proyecto de ciberperiodismo de viajes Tu Aventura. En esta página web encontramos crónicas de viajes, fotografías, noticias, etc., hechas por el propio Santiago o por otros colaboradores o corresponsales repartidos por el mundo, sobretodo por la zona iberoamericana. Todo esto es muy bonito, pero claro estos colaboradores son voluntarios y por tanto no ven un euro, y encima quiere que sigan viajando para escribir más crónicas, ¿pero como lo harán sin dinero?

Es muy fácil pedir la colaboración de la gente, pero siempre es importante recibir algo a cambio. De acuerdo queda muy bien decir que viajo y escribo porque me gusta, pero ¿a que si obtienes una recompensa por tu faena lo disfrutas más? Es lo que siempre se dice que lo ideal es trabajar de algo que te guste, pero a poder ser cobrando. Se trabaja para vivir, no se vive para trabajar. Además una profesión tan precaria como es el periodismo necesita empezar a que se valore más la faena hecha y que se obtenga una remuneración, y no que haya tanto intrusismo laboral y que cualquiera pueda ejercer de periodista. Porque en este proyecto se puede apreciar que hay varios colaboradores que no tienen estudios de periodismo, entonces ¿qué hacen en un proyecto de ciberperiodismo?

Esta página web incita a viajar con sus fotografías, las experiencias de la gente, las crónicas de un viaje... pero ¿dónde está la parte negativa de un viaje? Porque estamos de acuerdo que en los viajes no es oro todo lo que reluce. Siempre pasan anéctodas o episodios negativos que seguramente se olvidan y sólo recordamos lo bien que nos lo hemos pasado, pero también hay que explicar la vertiente negativa, sino la crónica del viaje no es completa. Las historias de esta página web se parecen a las películas de Hollywood porque siempre terminan bien. Además es muy fácil incitar a viajar, pero ¿quién paga el viaje? Porque recordemos que estamos en un período de crisis y no veo demasiado conveniente incitar a viajar cuando los viajes no son un bien de primera necesidad. Y los viajes que yo sepa no son baratos, sobretodo si quieres irte lejos.

Si les sobra el dinero que viajen a África, a una zona de refugiados o a un país devastado por una guerra y que ayuden a la gente con problemas, que los tienen y muchos. Eso si que sería un viaje provechoso. ¿Por qué no incitan a este tipo de viajes? La respuesta es clara, porque estos viajes no venden, no atraen visitantes a la web. Por último, si se recomiendan libros de viajes aparte de explicar de que van, no estaría de más hacer la referencia bibliográfica del libro con el correspondiente título, autor, editorial, páginas, colección, ISBN...

viernes, 27 de marzo de 2009

¿Robo o salvación?


En China, durante la Guerra del Opio, los ingleses robaron unos bustos del zodiaco chino, ahora el país asiático reclama estas esculturas. Casos como éste suceden a menudo durante las guerras, revoluciones, atentados, etc., aprovechando el caos que reina en esos momentos ya que la policía no puede velar por la seguridad. A estos robos se le llaman expolios, ya que los ladrones se llevan estas piezas de arte y luego las venden en el mercado negro. Por tanto, años más tarde pueden acabar en casas de subastas como Christie's o Sotheby's, y un estado puede comprar estas piezas con dinero público para exponerlas en un museo. Pero claro esta compra pública es una perversión ya que cada vez que un estado compra una obra de arte, el precio del resto que tiene ese autor aumenta el precio.

Por tanto, todo esto es un robo. Porque estamos de acuerdo, que durante las guerras se destruyen bibliotecas, archivos, museos, galerías de arte..., y es importante que alguien intente salvar estos tesoros, pero claro está después hay que devolverlos no comercializarlos. Ese es el problema que la gente ve una gran oportunidad de conseguir dinero fácil y lo venden rápidamente en el mercado negro. Es el problema de nuestra sociedad que sólo pensamos en el dinero, no en el valor sentimental o artístico de alguna cosa. Se nos ha hecho creer que lo importante son las cosas materiales, lo que tenemos, lo que poseemos, contra más dinero mejor, contra más coches y más caros mejor, contra más ropa de marca mejor, contra más pisos y casas mejor. Sólo queremos tener, abarcar más.

Ahora el problema es que estamos en un período de crisis, por tanto todo lo anterior se agrava porque la gente necesita dinero. Antes vivíamos en una sociedad consumista, lo que ganamos cada mes hay que gastárselo, ¿para qué ahorrar? ¿Quién se esperaba una época de vacas flacas? Pues el mundo del arte no es una excepción ya que en los últimos meses está habiendo un descenso drástico de vendas. Ferias de arte como ARCO, FIAC, Frieze o Basel lo están notando.


¿Pero que es arte? ¿Quién decide que es arte? Como curiosidad tenemos que en Valladolid unos obispos vendieron la reja de su catedral a un museo de Nueva York porque sobraba y ahora esta reja se está exponiendo en diversas salas neoyorquinas. El arte se mide por el valor monetario y también por el gusto. Pero los que deciden realmente que es arte son los intelectuales o críticos de arte ya que eligen que obra o pieza es buena y luego los ricos la compran. Unos ricos como los Thyssen que son grandes coleccionistas. Aquí en Cataluña para eludir los impuestos estos ricos se marchan a vivir a Madrid o Andorra para no tener que dar obras de arte o pagar dinero al estado cuando se mueren tal como marca la ley de sucesiones.


Por otra parte, el estado también obliga a los bancos y cajas de ahorro a pagar unos impuestos o a cambio crear un galería de arte o museo como por ejemplo CaixaForum. Por tanto tenemos dos tipos de arte, el arte privado y el arte público, ¿cuál es la mejor opción? Lo ideal es que convivan las dos posibilidades para el bien de los ciudadanos para que puedan ver el arte que deseen tanto pagando como sin tener que pagar.

domingo, 1 de marzo de 2009

¿Vicky Cristina Tópico?


La película de Woody Allen Vicky Cristina Barcelona ha sido alabada y criticada a partes iguales, por una banda a Penélope Cruz le han dado el Oscar a la mejor actriz secundaria, por otra parte mucha gente dice que el film es una postal de Barcelona y que salen muchos tópicos como el típico machito español interpretado por Javier Bardem.

Hay que decir que es verdad que la película enseña lo mejor de Barcelona, no enseña la pobreza, los mendigos, la delincuencia, los inmigrantes, etc., pero esta claro que si enseñara la Barcelona real, esta misma gente diría que Barcelona tampoco es así, ¿entonces en qué quedamos? Por ejemplo, en la India se han quejado de la película "Slumdog Millionaire" porque sólo enseña la pobreza y miseria de los indios, pues aquí hubiera pasado lo mismo, la gente nunca está contenta, llega un punto que se critica por criticar.

De acuerdo, en el filme sale el típico machito español que se liga a la rubia tonta, o sea Javier Bardem y Scarlett Johanson. ¿Pero esta situación solo se da en esta película? ¿No puede ser que a veces suceda y el típico ligón se ligue a una rubia y guiri despampanante? Pensemos que este guión ha sido inventado y que a veces la realidad supera a la ficción. Además, el trabajo de Penélope Cruz es deslumbrante, interpreta a una pintora loca, y hacer un papel así es muy difícil.

Tengo que decir que las películas de Woody Allen nunca me han gustado, pero "Match Point" y esta última han cambiado mi opinión y me han parecido muy buenas. También hay que pensar que esta película hará mucha publicidad de Barcelona si no la tenía ya, y esto atraerá a más turistas, una fuente de ingresos muy importante para las arcas municipales y más en tiempos de crisis.

Por último, comentar que parece que los tópicos siempre sean negativos, por ejemplo en la película se comen una paella y se beben un buen vino, una comida y bebida que se asocian a España, ¿y que tiene de malo comer paella y beber un buen vino? Pues si es cierto, como personas inteligentes que somos nos gusta comer una buena paella acompañada de un buen vino, yo no me avergüenzo, ¿y tu?